En un casting para una película porno casera contratan a una joven y a un tipo. El rodaje empieza, pero cuando ya han rodado suficiente, la protagonista se va al baño y uno de los cámaras la atiza en la cabeza con un bate, dejándola inconsciente y con una enorme brecha sangrando. Entonces empieza el rodaje de verdad: una snuff-movie.