Raúl es un fierrovejero retirado que tenía una labor muy importante: Colocar los fierros recolectados en el subsuelo fangoso de la Ciudad de México para evitar el hundimiento de los edificios. Al ser alcanzado por la edad, su hija decide llevarlo a un asilo para alejarlo de los peligros de su oficio. Raúl hará lo posible para cumplir con su tarea para así salvar a su familia y a toda la Ciudad de un colapso inminente.