Rush y Valens investigan el descubrimiento de 9 cráneos enterrados en un patio en una zona residencial. La casa estaba vacante desde 1972 cuando Simone Marks, una mujer de 32 años fue asesinada. Ella vivía con su hijo George de 12 años. Como el homicidio nunca fue resuelto, Rush y Valen lo reabren. Meses atrás, Rush y los detectives trabajaron en un caso donde se encontraron nueve cuerpos sin cabezas en un refugio animal, y la investigación los llevo al adulto George Marks. Los detectives están seguros que el es el asesino en serie pero no lo pueden arrestar por falta de pruebas.