En su nueva vida casado con Billie, Earl se lleva una enorme alegría al ver que su esposa ha hecho su propia lista, aunque pronto comprobará que no se toma el karma tan en serio como él. Por otra parte tendrá que compensar a Joel, un empleado de supermercado a quien arruinó su carrera al robar en su casa durante su participación en un concurso de empaquetado de bolsas de compra; éste querrá entrenarle para la próxima edición al comprobar sus buenos reflejos.