El grupo ha quedado para cenar en Flora. Antes, la mayoría ha recibido peticiones algo desesperadas de trabajo de parte de Eva. Miquel se conmueve y tiene una idea que comparte con los demás para ayudarla. Quim está convencido de que ha visto una señal y cree que se le abre la luz al final del túnel. Y se produce el encuentro. Marta, como siempre, tiene la necesidad de ser el centro de atención.