La historia se ubica en el siglo 22, donde la anti-gravedad y la tecnología de viajes a velocidad de la luz hacen posible la exploración espacial. Pero debido a problemas de placas tectónicas y al enorme daño ambiental, la Tierra tan sólo existe en los libros de historia: vivir en ella es imposible. En su lugar, los humanos viven en colonias espaciales, en satélites y en otros planetas.