Rayna pone todo su empeño en anular el contrato que une a Maddie con Edgehill. Avery tiene que demostrar que está capacitado para producir el disco de Sadie bajo la presión de Bucky, los antojos de Juliette y la situación personal de la cantante. Deacon empieza a organizar su vida en función de su enfermedad. Luke, Gunnar y Will improvisan una noche de copas para quitarse sus respectivos males de amores.