La esposa y el hijo del príncipe Paul mueren en el parto. Catalina lo obliga a casarse nuevamente para tener un hijo. En tanto, Grigory quiere tomar Crimea, pero Catalina no desea una guerra. Su relación comienza a tensarse, por que ella lo envía a Crimea para negociar la expansión de Rusia. Al mismo tiempo, decide convertir a Grigory en un príncipe ante la ira de su hijo y los ministros de gabinete.