Pase lo que pase, Alp (Sarp) va a hablar con Sirin, en un nuevo cara a cara. Bahar, quien se siente muy débil y dolorida por el progreso de su enfermedad, está dispuesta a hacer todo lo posible para evitar que sus hijos estén tristes. En materia de confesiones, el pequeño Doruk querrá expresar a su madre la opinión que tiene sobre Arif. Confiada en que su marido Alp no volverá a Estados Unidos, Piril decide volver. Con Jülide presente, las cosas se complicarán en el frente de Piril… Y Enver estará cada vez más de cerca de una verdad que no podrá creer...