Bahar está en shock tras ver a empeorar a Sarp en el hospital. Sincerándose con Fazilet, la protagonista no sabe cómo podría lidiar con su futuro y la crianza de sus hijos, mientras sigue asimilando la pérdida de su madre. Enver, que todavía no puede acostumbrarse a la ausencia de Hatice, continúa con sus discursos imaginarios. Sirin comienza a preocuparse tras la última vez que vio a su padre hablando solo. Pero nada estará tranquilo: un incidente relacionado con el propio Enver les hará entrar en pánico a todos.