La Sección Dos recibe la misión de vigilar a una importante política, la presidenta Isabella d'Angelo, cuya agencia está a cargo del proyecto del puente del Estrecho de Messina. Mientras tanto, los agentes de la PRF envían a Nino, el "Terrier Tibetano", uno de sus mejores secuestradores, para capturarla. Henrietta y Rico se pelean después de que este último rompe el caleidoscopio de la primera, y José lo lleva a reparar, en la misma tienda de antigüedades en la que Nino trabaja como tapadera. José y Henrietta son entonces asignados a vigilar a la presidenta d'Angelo, que debate la moralidad de utilizar niños como soldados con Pieri Lorenzo. José descubre a un agente de la PRF en el personal de la presidenta y utiliza su información para tender una trampa a los hombres de Nino.