Shintaro Kurenai, un chico de 16 años, es un mediador, un especialista en resolver disputas entre la gente. A pesar de ser tan joven y de ser muy despreocupado, es un chico con unas habilidades increíbles a la hora de proteger a sus clientes y a sus propios intereses. Entonces, un día, le presentan a la hija de una familia rica y poderosa, proponiéndole ser su guardaespaldas, que de alguna manera termina siendo el propietario de la niña de siete años, autoproclamándose su prometido.