Victoria (Julieta Cardinali) está cada vez más enamorada de Rafael (Luciano Castro). Pero sus sentimientos se vuelven obsesivos y peligrosos. Al ver al capataz cada vez más cerca de Julia (Araceli González) y sospechar que la maestra está secretamente enamorada de él, la doctora enloquece de celos y ya no se siente capaz de contener sus impulsos. Sin que nadie pueda advertir su presencia en la estancia, Victoria alcanza a escuchar una conversación en la que Julia habla de Rafael y deja en evidencia que siente algo por él. La mente de Victoria se dispara y la ilusión de terminar con la vida de la maestra se vuelve un sueño tan real que provoca escalofríos. Por fortuna, Rafael llega a tiempo y, por ahora, lo que ocurre dentro de la cabeza de Victoria sigue siendo un oscuro secreto.